22
Jan
Siete águilas
Siete águilas en mi cándido hipotálamo: enormes, fuertes, elegantes. Revolotean a la sombra de mi memoria, levantando polvo, soplando hielo, reviviendo el pasado y oscureciendo el presente.
Siete águilas en canto unísono: constante, insistente, ensordecedor. La melodía me acaricia con furia, un tarareo con dedicatorias de amor, destapan silencios y guardan anhelos.
Siete águilas en mis sueños recientes: vibrantes, tangibles, concientes. Me persiguen cuando abro los ojos, me asechan cual presa en mi propio jardín, en el bosque de mis recuerdos.
Siete águilas en el corazón herido: vigilantes, persistentes, reminiscentes. Delirios del futuro que se esfumó, rencores que buscan absolución, pasiones reprimidas y encuentros añorados.
Siete águilas en mis manos: hermosas, brillantes, poderosas. Las dejo en libertad para volar lejos, inalcanzables a mi pensamiento, inborrables en mi cuerpo, libres de mí, libres al fin.